Con la Feria de Economía Solidaria llega la tercera edición del informe “El estado del mercado social catalán”, correspondiendo al ejercicio 2016. Con la creciente presencia y capilaridad de la Economía Social y Solidaria (ESS) en Cataluña, este informe hace una foto fija para entender como está este movimiento hoy.

Gracias al análisis hecho con este informe podemos saber la medida mediana de una organización de ESS, el estado y número de redes locales y territoriales y el desempeño de criterios socioambientals de las 146 organizaciones que han obtenido el balance social y las 160 que se incorporaron al Palmo a Palmo durante el 2016. A la presente edición, dedicamos la primera parte del informe a exponer los resultados de una investigación-acción llevada a cabo por la comisión de intercooperació de la XES, para entender cuáles son las claves del éxito y los principales retos de las dinámicas intercooperatives entre organizaciones. Tenéis el informe disponible aquí, y también podéis descargaros el resumen ejecutivo. En esta infografía podéis consultar los principales resultados.

Cómo decíamos, este informe permite poner al día el estado de los diferentes procesos y herramientas desplegadas por la Red de Economía Solidaria en la construcción de mercado social. Además de proyectos consolidados como la Feria o el Balance Social, los procesos de articulación territorial están tomando cada vez más fuerza: actualmente hay 9 redes locales de economía solidaria consolidadas, y 6 más en fase de constitución. Estas redes son la base sobre la que articular mercados sociales locales e introducir nuevas lógicas en las dinámicas de desarrollo local. Además, el ESS cuenta cada vez con un mayor reconocimiento público e institucional, y se están impulsando programas y políticas tanto en el ámbito municipal como nacional que promueven la creación de nuevos proyectos e intentan generar condiciones para su viabilidad, como el programa de Ateneos Cooperativos de la Generalitat de Cataluña o el Decreto de Contratación Pública Social del ayuntamiento de Barcelona.

Si nos fijamos en las cifras de la presente edición del informe, vemos que a la presente campaña ha habido un 43% más de organizaciones que han hecho balance social, llegando a la cifra récord de 150. Prácticamente el 57% son cooperativas de diferentes tipos, y el 81% son socias de la Red de Economía Solidaria. Los datos recogidos –y gracias también a los registros históricos, desde 2012- nos permiten saber que una organización de la ESS tiene, de media, 20 personas trabajadoras y factura 750.000€. Y también que entre todas las organizaciones de la XES tienen una base social de 150.000 personas, generan 4.200 puestos de trabajo y facturan 150 millones de euros.

Si nos enfocamos en los criterios de funcionamiento, podemos asegurar, sin ningún tipo de duda, que las empresas y entidades la ESS fundamentan su actividad en criterios éticos y tienen un impacto transformador positivo sobre el territorio y el entorno donde se ubican. Aquí os dejamos algunas muestras:

– La democracia es uno de los elementos diferenciales del ESS: este es el tercer criterio más muy puntuado por las 219 organizaciones del Palmo a Palmo (3,03 sobre 5), y vemos que una de cada cuatro personas están implicadas en la aprobación de presupuestos y planes de gestión.

– En cuanto a paridad , la gráfica siguiente muestra la tendencia a la paridad tanto a las estructuras laborales como las rectoras.

– Si nos miramos los indicadores ambientales, vemos que el 84% de las organizaciones que han hecho balance social utilizan papel reciclado de manera regular y mayoritaria y el 74% compra de manera generalizada productos de proximidad. Los datos de gestión de residuos son reforzadas por el Palmo a Palmo, donde este criterio es uno de los mejores puntuados: 3,13 sobre 5.

– En cuanto a la implicación con las finanzas éticas, el 15% de los depósitos de las empresas y entidades estaba en finanzas éticas, contando de media un saldo de 21.500 euros por organización.

– El tenedor salarial interna es de la orden de 2,3 a 1 por las mujeres y 1,9 a 1 por los hombres.

– En cuanto a compras dentro del circuito de mercado social, el 21,6% del total se habían hecho a emprendidas proveedoras de la ESS. Destaca especialmente el papel de las cooperativas de trabajo, que llegan hasta el 32,5%.

– Sin duda, uno de los puntos fuertes del ESS es el bienestar laboral y la posibilidad de desarrollo personal que ofrecen a las personas trabajadoras. La gráfica siguiente revela algunas de estas magnitudes (los resultados provienen de cuestionarios de calidad laboral contestados por 965 personas trabajadoras, el 43% del total de las 144 organizaciones que han logrado valoración positiva de su balance):

Las conclusiones a que nos traen los resultados de este informe son muy positivas. La efervescencia en el territorio para impulsar redes locales, la receptividad desde los ayuntamientos, la creciente importancia del balance social como herramienta de medida de impacto, los procesos de coordinación sectorial para hacer saltos de escalera, el papel clave del Palmo a Palmo para hacer diagnósticos de ESS en el territorio… y no se trata con sólo que haya todas estas señales, sino que están conectadas, que forman parte de un todo, de un movimiento de fondo que tiene que permitir que cada vez más necesidades las podamos cubrir desde una economía de escalera –y rostro– humano. Os invitem a todos y todas a formar parte!